Un nuevo faro del desarrollo tecnológico argentino con una mirada inclusiva y responsable
Desde su creación el 4 de junio de 2024, el Instituto Argentino de Inteligencia Artificial (INARIA) se posiciona como una institución clave para impulsar una IA con* valores democráticos, formación federal y enfoque ético*. Su misión es fortalecer el ecosistema tecnológico local y promover el uso transparente y responsable de la IA en sectores públicos y privados de todo el país.
Formación, alianzas y federalismo digital
En su primer año, INARIA firmó convenios con varias universidades nacionales —entre ellas UTN, UNDAV y UNER— para lanzar diplomaturas y capacitaciones en IA adaptadas a públicos no técnicos, con foco especial en sectores como energía, salud e industria PyME. Más de cien empresas industriales ya participaron de estos cursos, cuyos diplomas fueron entregados entre 2024 y abril de 2025 —como destacó José Olano Melo, director de Estudios y Proyectos del instituto.
Además, INARIA hoy está desplegando nuevos acuerdos con actores provinciales, como la Municipalidad de Comodoro Rivadavia en Chubut, y universidades de la provincia de Buenos Aires, con el objetivo de convertir la Patagonia en un polo tecnológico basado en IA.
Ética e IA: un compromiso no negociable
El enfoque ético de INARIA es central. El instituto desarrolla algoritmos seguros y sostenibles, pensando especialmente en mitigar riesgos como los deepfakes y la desinformación, fenómenos que socavan la confianza ciudadana. En una era donde la velocidad de propagación de noticias falsas puede sobrepasar los mecanismos de control, Olano Melo advierte: «el verdadero problema radica en la velocidad de propagación… Su impacto puede ser irreversible».
Para reconocer iniciativas alineadas con esta visión, INARIA lanzó el Premio IA Ética y Sostenible, con categorías para emprendimientos, instituciones educativas e iniciativas ambientales. La convocatoria estará abierta hasta julio y busca destacar proyectos con impacto social positivo.
Vinculación tecnológica: academia, gobierno y sociedad civil
INARIA promueve la colaboración entre el sector público, el ámbito privado y el académico. Recientemente firmó un convenio con la Sociedad Argentina de Inteligencia Artificial (SAIA) para generar propuestas educativas, fomentar transferencia tecnológica y conectar profesionales del ámbito IA.
Además, fue invitado como actor estratégico para integrar la mesa de inteligencia artificial del sector civil, convocada por la Secretaría de Innovación Ciencia y Tecnología, con el propósito de analizar toda la cadena de valor de la IA: infraestructura, capacitación, regulación y talento digital.
Contexto internacional y orientaciones éticas globales
INARIA se enmarca en un panorama global donde los principios éticos cobran protagonismo. Documentos como los de la UNESCO, la OECD y organismos globales respaldan marcos de IA centrados en el bienestar humano, la transparencia, la equidad, la protección de datos y la gobernanza inclusiva+4.
En Argentina, la Agencia de Acceso a la Información Pública (AAIP) también impulsa iniciativas concretas de regulación confiable, como la Resolución 161/2023, que desarrolla programas nacionales sobre transparencia y uso ético de IA en el sector público y privado.
Análisis: ¿por qué INARIA marca la diferencia?
Fortalezas
- Visión estratégica de cooperación federal y formación inclusiva.
- Liderazgo en ética digital, con premios, guías de buenas prácticas y enfoque de responsabilidad social.
- Capacidad de articular la academia, el Estado y el sector productivo para proyectos vinculantes en distintas regiones del país.
Desafíos
- Necesidad de escalar estas iniciativas a mayor cantidad de municipios y provincias.
- Requiere asegurar continuidad política y presupuesto a largo plazo para fortalecer sus programas.
- Convertir sus recomendaciones en políticas públicas vinculantes evitará que queden relegadas al ámbito académico o testimonial.
Un año y un modelo para construir
INARIA ha trazado un camino ambicioso: democratizar la IA con justicia social, federalismo digital y ética. Sus alianzas, programas educativos y marco de principios lo posicionan como una plataforma fundamental para consolidar la adopción responsable de la inteligencia artificial en Argentina. Ahora queda el desafío de multiplicar su impacto, asegurar su sostenibilidad institucional y traducir sus propuestas en regulaciones concretas que sirvan al bien común.